En esta cuarta temporada, Casey se puso en una situación peligrosa, trabaja de encubierto para derribar una red de tráfico que se ejecuta fuera del club Nesbitt, los resultados y la alta tasa de rotación de la escuadra son una desagradable sorpresa para Severide. En otros eventos, Dawson reconoce que su vida está a punto de cambiar, un nuevo candidato hace su primera aparición, y los residentes se unen para protestar contra una guarida de drogas en su barrio.